La negación más radical de la verdad sobre el ser humano en la vida social y política es la injusticia que se comete con las personas. Por eso, la existencia de empobrecidos es un signo inconfundible de la falta de verdad humana de una sociedad. La solidaridad con los empobrecidos, por el contrario, es signo de la verdad humana de una sociedad.Es por eso que la acción política solo busca la verdad cuando persigue la justicia para que todas las personas puedan vivir dignamente. Pero en nuestra sociedad, sucede muy a menudo que la verdad se sustituye por el interés, la conveniencia o el propio gusto, desde una concepción individualista y hedonista de la vida social. Además, en nuestra sociedad se han impuesto los criterios de la utilidad y del tener sobre la dignidad humana. Una economía sin rostro humano provoca grandes desigualdades e injusticias.
Frase DSI
Una política para la persona y para la sociedad encuentra su rumbo…en la defensa y promoción de la justicia…que sostiene el empeño de favorecer los derechos y deberes de cada uno, sobre la base de la dignidad personal del ser humano.
Juan Pablo II, Christifideles laici 42
Actuar
Párate un segundo a observar la realidad de nuestra sociedad, ¿qué crees que pasa en ella con respecto de la verdad y la justicia que hemos comentado en el vídeo? ¿Qué podemos hacer para que crezca la verdad y la justicia?
Descarga la ficha asociada
Vídeo anterior:
Vídeo siguiente:
You Might also like
-
Los valores fundamentales en la vida social 2
Una vida social sin valores éticos es como una flor que se marchita y pudre y, por eso, la DSI considera centrales y fundamentales para la vida y la acción política cuatro valores: la verdad, la justicia, la libertad y, sosteniéndolos todos, el amor, la caridad política. Vivirlos y ponerlos en práctica nos conducen hacia la realización personal y hacia una convivencia social más humana.
-
La participación en la vida política
La participación es el elemento esencial y central de la democracia. No hay verdadera democracia sin participación. Toda democracia debe ser participativa. La participación en la vida política es expresión de lo que el ser humano es, de su dignidad y responsabilidad hacia los otros y hacia el bien común. Y es que lo propio de la dignidad humana es que la persona sea sujeto de la vida social, nunca objeto pasivo o instrumento, y por eso es tan importante la participación.
-
Iglesia y comunidad política
¿Alguna vez has escuchado la frase “La Iglesia no debería opinar sobre esos temas”? Vamos a ver cómo entiende la Doctrina Social de la Iglesia la relación entre la Iglesia y la comunidad política.
Para que una democracia sea real y no solo lo sea de nombre, debe acoger la pluralidad de cosmovisiones, ideologías y sistemas de valores presentes en la sociedad, que existen como fruto de la libertad de conciencia de las personas.