La vida que Jesús va a dar por las víctimas no deja vivir a los victimarios (los que viven a costa de los pobres): «¿Hasta cuándo vas a no dejarnos vivir?». Y mi vida, ¿es también un constante desasosiego para los victimarios actuales de esta crisis? En la entrega de Jesús veo estas dos características: 1. se da por todos; 2. como víctima contra los victimarios. ¿Cómo encarnar en mí esta “parcialidad católica”? Se trata de la misma parcialidad-universal que encuentro en las bienaventuranzas de Jesús: “Bienaventurados los pobres… Ay de los ricos…”.
Ver más oraciones aquí Para saber cómo bajar este documento, imprimir, etc. ver: “Cómo descargar documentos de hoac.es”