
Se nos convoca de nuevo a la Vida: a la mesa fraterna, a la mesa de la Eucaristía, a la mesa en la que compartir el pan nos permite reconocer al Resucitado presente en la existencia humana, compañero de camino, capaz de rehacer nuestras fuerzas, nuestra ilusión, nuestra esperanza. Capaz de dar impulso nuevo a nuestros compromisos. Se nos convoca de nuevo a la calle, a la tarea, al encuentro.
Merece la pena el camino, la cruz, la espera junto al sepulcro, la confianza en el amor. Dios es fiel.
Domingo Ramos 2023