Nota de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) ante la instrucción pastoral “Iglesia, servidora de los pobres” de la Conferencia Episcopal Española.

Madrid, 28 de abril de 2015.

La Comisión Permanente de la Hermandad Obrera de Acción Católica acoge y agradece la Instrucción pastoral “Iglesia, servidora de los pobres” hecha pública tras la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal. Con ello, también nos sumamos al dolor expresado por nuestros obispos ante la difícil situación que sufren las familias trabajadoras y que tanto nos afecta en los centros de trabajo, en los barrios, en las parroquias y en nuestras casas.

Se trata de un documento positivo, claro, valiente y humilde, escrito en un tono de profundo respeto y diálogo con la sociedad y que trata de iluminar situaciones concretas en el diagnóstico de las tres graves crisis (económica, social y moral) que nos afectan. Valora muy positivamente también la firmeza que expresa en la exposición de las implicaciones sociales de nuestra fe.

Así mismo, lo consideramos un aliento al trabajo de tantos militantes cristianos que, bajo los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, ponen luz y humanidad a la dura realidad donde nos encarnamos. La dignidad de la persona, el bien común, el derecho a un trabajo digno y estable, la solidaridad, la defensa de los derechos y la promoción de deberes, el principio de subsidiariedad… recogidos en el documento, son referentes de trabajo irrenunciables para la HOAC como movimiento de Acción Católica especializada.

“Iglesia, servidora de los pobres” nos invita a seguir mirando y atendiendo la realidad actual de empobrecimiento y deshumanización del mundo obrero y del trabajo y detenernos en las causas que la provocan, para seguir ofreciendo el proyecto de realización humana que nos ofrece Jesús de Nazaret y responder desde él a las necesidades y los anhelos del hombre y la mujer del mundo obrero de hoy. La nueva evangelización pasa necesariamente por combatir ese empobrecimiento y  deshumanización que genera el sistema económico y social vigente, y por colaborar a construir una vida social más justa. Nos sentimos llamados a ir construyendo, junto con tantas y tantos cristianos y no cristianos, otra forma de sentir, vivir y hacer que sean respuesta humanizadora para las personas del mundo obrero y del trabajo.

La HOAC se compromete a trasladar este documento al conjunto de sus militantes y a los ambientes en los que se mueve, aprovechando el tiempo de diálogo motivado por nuestra XIII Asamblea General, convocada para seguir Construyendo Iglesia en las periferias del mundo obrero. Nos sentimos fortalecidos para seguir evangelizando y anunciando el Evangelio en la realidad esencial del trabajo humano… con palabras y obras,  “trabajando por la justicia y denunciando las injusticias”.