Mundo obrero y del trabajo >> , ,

Nuevo sindicalismo

06 mayo 2013 | Por

Nuevo sindicalismo

La campaña «Marcos Readmisión» combina las redes digitales y la calle. «Somos cuatro monos, mal organizados, sin mucha idea de nada, pero hemos conseguido romper el cerco mediático en torno a Telefónica, uno de los mayores inversores publicitarios del país», afirma Fermín Rodrigo, militante de la HOAC de Barcelona, ex trabajador de Telefónica y activista de la campaña «Marcos Readmisión».

Marcos Armenteros, empleado en Barcelona, fue despedido, junto con otra trabajadora de Madrid, en 2010 por haber estado de baja médica por una hernia discal debidamente diagnosticada y tratada. Logró la nulidad en primera instancia, hasta que Telefónica obtuvo de los tribunales una sentencia que convirtió el despido nulo en improcedente. Se quedó en la calle pero con una indemnización.

El caso de Marcos, y de la otra trabajadora de Madrid, fue interpretado como un primer aviso a la plantilla y sus representantes, en plena negociación del convenio y del ERE que iba a recortar la plantilla en unos 6.500 trabajadores. El trabajador habló con sus compañeros del sindicato de su disposición a iniciar una movilización social. Las organizaciones con menos representación se sumaron a la nueva fase de lucha sindical, mientras que las mayoritarias dejaron hacer. Las protestas, de lo más variadas, se sucedieron.

En noviembre de 2012 Marcos Armenteros y cinco compañeros de Telefónica iniciaron una huelga de hambre indefinida contra los despidos por bajas médicas y la readmisión inmediata. Duró 23 días. Las redes sociales causaron un gran impacto en la imagen de la compañía, después de que el conflicto llegará a convertirse en uno de los asuntos más leídos en Twitter. El teléfono de atención al cliente de Telefónica quedó colapsado. En febrero de 2013, durante el “Mobile World Congress” de Barcelona, el principal escaparate mundial del sector, 15 personas desarrollaron otra huelga de hambre. Además, hubo concentraciones, huelga y manifestaciones, pero también representaciones callejeras de protestas («flashmob»), y, cómo no, otra batalla digital.

La desigual lucha continúa, sin que Marcos haya sido readmitido, ahora en medio de una nueva negociación del convenio y el final del ERE puesto en marcha en 2011. Por eso, Fermín Rodrigo cree que la campaña por la readmisión de Marcos muestra que «los sindicatos mayoritarios no es que no sean necesarios, sino que ya no son imprescindibles» y que «dado que casi nadie está dispuesto a pelear en su puesto de trabajo, sea por ideología, por economía o por miedo, el futuro pasa por combinar la movilización en los centros de trabajo –transgrediendo las normas si hace falta, cuestionando las imposiciones– con la calle y la batalla por la imagen pública, para aunar fuerzas con los movimientos sociales, que en este caso han dado un apoyo muy importante».

Fermín piensa que es crucial ampliar la mirada sobre el trabajo para conectarlo con la vida: «el puesto de trabajo es importante, por razones económicas, por sus implicaciones para la salud y la vida social y familiar… Hay que defender el trabajo pero también la educación, la sanidad…». «Hay que replantearse muchas cosas, empezando por el sentido del trabajo asalariado y por revisar cuánto capitalismo tenemos cada uno dentro de nosotros», afirma Fermín, para quien, «sin haber ganado nada todavía», puede que la lucha de Marcos sea «una primera victoria» hacia los nuevos tiempos.

Publicado en Noticias Obreras nº 1547, mayo 2013.

Revista TU!

Acceso a la suscripción.
■ Edición digital www.hoac.es/tu

Nuevo libro

Ultimo cuaderno

Redes Sociales

Instagram


© 2024 HOAC.

| Diseño original | DET | Adaptación de ACF | Desarrollado con WordPress | CM/Admo