Más de 20.000 trabajadores de los principales productores textiles de Turquía han protagonizado una importante huelga ante la intransigente actitud de las empresas sobre las peticiones de aumentos salariales. Los sindicatos pedían un incremento salarial del 15% y las empresas solo ofrecían un 3%.

El salario medio del sector está en el equivalente a 450 euros al mes, pero el 55% de los trabajadores cobra el salario mínimo legal (equivalente a 380 euros). Muchos trabajadores del textil viven por debajo del umbral de la pobreza y como los salarios y las prestaciones son tan bajos, los trabajadores más cualificados abandonan en sector; por ello, la tasa de rotación del personal en el textil turco es del 37%.

La huelga ha finalizado con éxito para los trabajadores que han logrado ver plasmadas sus principales reivindicaciones en un nuevo convenio colectivo que tendrá una vigencia de tres años.