Jesús vino a liberar a todos los hombres/mujeres, sin exclusión ninguna. Esta liberación es más importante que la iglesia, es su razón de ser: realizar verdaderamente su servicio a los oprimidos, alegrándose con todos los que se dedican a ello fuera de sus fronteras canónicas. ¡Qué haya vida y vida abundante para los pobres! De eso se trata.