Juan Antonio Rodríguez Pesquera, de Gallarta, se ha ido a Misiones. El pasado 26 de abril tomó el avión rumbo a su destino, Angola, donde compartirá vida y trabajo con el equipo de Cazenga, entre los que se encuentra el sacerdote misionero mutrikuarra Andoni Illarramendi.

Juanan posee una larga trayectoria de compromiso en la HOAC. A principios de 2011, se acercó a la delegación de Misiones con disposición de marchar un tiempo a nuestras Misiones Diocesanas. Dentro del marco de formación de la delegación vinculado al SALE, Juanan ha realizado el proceso de formación y discernimiento de la mano de Misiones. En julio de 2011, viajó a Angola por un mes como parte de ese  proceso. “La juventud ve con buenos ojos eso de ir un tiempo al Sur con una organización u otra, pero que un hombre creyente comprometido en el mundo obrero quiera dedicar un tiempo de su vida a irse a misiones con la confianza plena en QUIEN le envía, es ciertamente algo menos común” destacan los responsables de Misiones Diocesanas.

El obispo, mons. Mario Iceta, confirmó su envío a la diócesis de Viana en Angola, y el pasado domingo, 22 de abril, tenía lugar en su parroquia de Gallarta la celebración de envío misionero. “Fue una celebración emotiva y sentida en la que sus familiares, sus compañeros de la HOAC, misiones y sus amistades tuvieron oportunidad de mostrar su apoyo en la opción tomada”, explican los asistentes. Su opción no es estrictamente personal, sino que hay muchas personas que tienen algo que ver en ello y es enviado por la diócesis. Al inicio de la celebración, Sonia Samaniego, en representación de su equipo de la HOAC, realizó una presentación de la trayectoria de compromiso llevada a cabo por Juan Antonio y, Feli Martín, Directora de Misiones Diocesanas Vascas, le impuso el crucifijo misionero.

Desde la HOAC de Bizkaia le transmitimos estos sentimientos:

““Son muchos los años desde que nos conocemos tu sonrisa, tus ganas de vivir y luchar, tu entrega y generosidad, tu ser diferente y revolucionario, tu testimonio nos han ayudado, ayudarán  y serán   nuestra fuerza.

Gracias por estar ahí y por ser como eres.

Animo y que Jesús Obrero siga siendo nuestro arrope y sentido.

Cercano como siempre, más si cabe, en la distancia física hoy te  decimos:   ¡Jarp, hasta pronto!. Tus huellas que intentamos seguir, son las huellas de Jesús.

Hasta pronto y que Dios Padre y Madre nos ayude en esta tarea de construir su Reino  en nuestros corazones, en el seno de la clase obrera y en nuestra Iglesia.

Un abrazo y, eso, que te queremos. Besarkada handi bat maite zaituztegu