Un reciente informe de la ONU («Un piso de protección social para una globalización equitativa e inclusiva»), que defiende que un mínimo de protección social es imprescindible para luchar contra el empobrecimiento, impulsar la cohesión social y un crecimiento económico con sentido, subraya que la inmensa mayoría de la población mundial carece de ese mínimo de protección social: de los 7.000 millones de habitantes del planeta, 5.100 millones de personas carecen de una seguridad social o de una protección social adecuada; y poco más del 15% del total de desempleados del mundo tienen acceso a alguna forma de protección por desempleo.