Milagros Villamarín, militante de la HOAC de Huelva desde hace más de 40 años, asegura que hace tiempo que aprendió que a la HOAC nunca le podía decir que no, puesto que la HOAC le ha dado a ella «demasiado».
Por eso cuando, una vez más, la HOAC ha acudido a ella para encargarle un nuevo servicio, aunque piensa que está más capacitada para prestar otros, no ha tenido más remedio que aceptar, además con el convencimiento de que Dios y el Espíritu se manifiestan a través de la comunidad… «Son más sabios que yo y ellos sabrán sus razones», añade.
La misión es ejercer, junto a otro militante, el papel de moderadora en la XIV Asamblea General de la HOAC, es decir, moderar los diálogos que tengan lugar en el plenario general. Esto implica conocer muy bien los temas que se van a tratar para centrar los diálogos en las cuestiones esenciales. Así, además de dar paso a los distintos puntos del orden del día, Milagros tendrá que hacer lo posible por favorecer un clima de diálogo, «en el que toda la militancia se sienta libre para participar y de dialogar sobre los temas propuestos con el respeto necesario a los tiempos para permitir la intervención de todos, ayudando al respeto de los tiempos sin generar crispación».
Aunque su papel es importante y no será fácil, asegura que siente tranquilidad, porque está convencida de que la militancia es muy consciente de las dificultades de gestionar una asamblea con tantas personas, además de «extremadamente cuidadosa y respetuosa» con todas las normas que nos ponemos para garantizar el buen hacer y buen vivir de nuestra XIV Asamblea General.
Llévatelo y comparte
Esta sección también la tienes en documento pdf e imagen png para que la puedas descargar, imprimir, compartir…
Periodista.
Colaboradora del ¡Tú!
