La asamblea diocesana de la HOAC de Bizkaia, reunida el día 19 de octubre de 2013 ha acordado:

Mostrar su solidaridad con los/as trabajadores/as que están sufriendo un recorte en sus derechos debido a la paralización en la negociación de sus convenios colectivos. Como ejemplo podemos citar la situación de las 22.000 personas del sector de oficinas y despachos de Bizkaia, o las 12.000 de la red de centros de educación concertada. En estos sectores, la representación sindical, de forma unánime, ha convocado distintas movilizaciones y huelgas.

Creemos que estas situaciones tienen su origen en las últimas reformas laborales, que han roto el equilibrio en las fuerzas de los agentes sociales ante la negociación colectiva, dejando a la representación de los/as trabajadores/as en una posición muy débil.

Además no podemos obviar que las relaciones laborales de muchas de las personas que trabajan en los organismos de nuestra Iglesia diocesana están reguladas por estos convenios.

Tenemos el convencimiento de que la Iglesia no puede ni debe conducirse por los criterios mayoritariamente asumidos en el mundo empresarial (competitividad, beneficio, etc.) sino por los valores evangélicos. Por ello queremos invitar a los órganos de gobierno de nuestra Iglesia diocesana y a la comunidad creyente a mostrar algún gesto de solidaridad con las personas que están sufriendo una merma en sus condiciones laborales y con las que han perdido o no encuentran un trabajo digno, empobreciendo sus condiciones de vida y de sus familias.

Ante estas situaciones, hacemos nuestras las palabras del Papa Francisco: “La sociedad no es justa si no ofrece a todos un trabajo o explota a los trabajadores (…) No pagar lo justo, no dar trabajo, porque sólo se ven los balances, sólo se ve cuánto provecho puedo sacar… ¡Esto va contra Dios!”