Continúan las acciones del movimiento sindical internacional para que las obras del Mundial de Fútbol de Qatar en 2022 se hagan respetando los derechos de los trabajadores. Son obras que hacen trabajadores inmigrantes que carecen de todo derecho. En diciembre estos trabajadores han podido expresar en Doha, por primera vez, sus reivindicaciones de libertad sindical y negociación colectiva.

Son más de 1,2 millones de trabajadores inmigrantes a los que se niega el derecho a crear o afiliarse a un sindicato, viven en campamentos de trabajo miserables, cobran sueldos muy bajos y los reciben con retraso, no tienen forma alguna de que se atiendan sus quejas sobre unas condiciones de trabajo pésimas y sin medidas de seguridad. Por eso, el movimiento sindical internacional dice «No a la Copa del Mundo sin derechos laborales», porque en las actuales circunstancias, subraya la Confederación Sindical Internacional, «en la construcción de las infraestructuras para la Copa del Mundo de Qatar van a morir más personas que jugadores habrá en los campos».