HOAC La Rioja/ El pasado 4 de Noviembre, Aitor Iturralde, transportista autónomo de 46 años y vecino de Orio, (Guipuzcoa), fallecía en accidente laboral “in itínere”, en el término municipal de El Villar de Arnedo. Ocurrió en la N-232 al colisionar frontalmente con otro camión que circulaba en sentido contrario. Estaba casado y tenía dos hijos.

Aunque este año la frecuencia de accidentes laborales con resultado de muerte ha disminuido, sabemos y tenemos claro, por desgracia, que es meramente circunstancial, porque no responde a medidas concretas adoptadas para atajar definitivamente el problema de la siniestralidad laboral y eso que posiblemente, sea el sector del tráfico en el que mas dedicación y empeño se haya puesto en estos últimos años para frenar la mortalidad.

Sin embargo, queremos denunciar que estas medidas correctoras no son suficientes (uno de cada tres accidentes laborales mortales se producen por el tráfico), porque no van dirigidas a solucionar y prevenir la accidentalidad laboral “in itínere”.

Y esto lo denunciamos, porque todos conocemos que las causas de los accidentes laborales en carretera responden a muchos factores que pasan completamente desapercibidos o deliberadamente ignorados, a las Empresas y Administración: La precariedad, la subcontratación, la competencia desleal, las pésimas condiciones de empleo y trabajo, los ritmos, la fatiga, los horarios irregulares, el estado de algunas carreteras, la falta de áreas de descanso dignas etc., son factores que están ahí, influyendo en la inseguridad de este sector, repercutiendo directamente en los que desarrollan su trabajo en la carretera.

El pasado 10 de noviembre nos concentramos en Logroño para protestar, una vez mas, y reivindicar con fuerza la necesidad de emplearse a fondo con medidas eficaces, para evitar tanta muerte innecesaria, por evitable, en el trabajo, en cualquier trabajo y en este en particular, porque su número aumenta progresivamente y eso que no se contabilizan todos los accidentes mortales que realmente suceden.

Queremos también expresar nuestro dolor y tristeza por la muerte de Aitor y a la vez solidarizarnos con el sufrimiento de su familia y amigos.

Así mismo, nos unimos a todas las muestras de rechazo y denuncia que por este y por otros obreros fallecidos se hacen en el Estado Español.