Militantes de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) acompañados por el director del Secretariado Diocesano de Pastoral del Trabajo y miembros del Equipo de Pastoral Obrera (EPO) de la parroquia de San José Obrero de Puente Genil (Córdoba) visitaron y acompañaron a los trabajadores en huelga de la empresa Hermanos Campano, una subcontrata de transporte que distribuye en Andalucía, Extremadura y Portugal los productos de la marca Bimbo, fabricados en la localidad.
Los trabajadores en huelga se mantuvieron concentrados a las puertas de la planta de Bimbo los días 8, 9, 11 y 12 de diciembre. En las visitas que les hicimos escuchamos sus reivindicaciones para que les abonen la nocturnidad, las dietas, los complementos en el mes de vacaciones y el trabajo en domingos y festivos. Que se pague y contabilice como jornada el tiempo de carga y descarga y los tiempos de espera (hasta ahora solo cuenta el tiempo en que el camión está rodando). Que se respeten los descansos diarios e intersemanales, que no se les obligue a conducir camiones con la ITV caducada, con ruedas en condiciones deplorables que sufren reventones frecuentes, etc.
La mayoría de estas peticiones no habría que hacerlas si los mecanismos de inspección y control funcionaran, pues se trata de simples e incuestionables incumplimientos de la legislación vigente tanto nacional como europea.
Una de las demandas que con más fuerza nos hicieron llegar es la readmisión del trabajador despedido, miembro de la Coordinadora de Trabajadores de Andalucía (CTA) y que la empresa ha utilizado, según nos cuentan, como una estrategia puramente represiva en contra de dicho sindicato y para amedrentar al resto de los trabajadores. El despedido no ha sido ninguno de los trabajadores eventuales sino uno de los más antiguos, lo que significa que el coste para la empresa será mucho mayor. Pues, a pesar de ello y aun reconociendo la improcedencia del despido, la empresa se niega a su readmisión.
Acompañarlos para nosotros y nosotras significa hacernos presentes como Iglesia defensora del trabajo decente, mostrarles nuestra cercanía y preocupación por su situación, manifestarles que nos importan, que su dolor es nuestro dolor, ofrecerles apoyo dando a conocer el conflicto a través de los medios diocesanos y medios de información de los movimientos, como es el caso de este artículo, generar vínculos, interesándonos por sus familias y conectando con sus representantes sindicales, lo que nos ha posibilitado una fluida comunicación posterior, brindarles ayuda económica, a través del fondo de solidaridad de la HOAC de Córdoba y del propio Secretariado de Pastoral del Trabajo y, por último, transmitirles el ánimo necesario para seguir buscando, junto a sus representantes sindicales, un acuerdo justo que respete la dignidad de las personas del trabajo.
Seguiremos muy de cerca la resolución de este conflicto y continuaremos atentos a las necesidades de estos trabajadores y sus familias.
Discernimiento
En el documento de la Conferencia Episcopal Española Fieles al envío misionero, en las orientaciones pastorales y líneas de acción (2021-2025), los obispos nos llaman a:
- «Acompañar a los trabajadores pobres, precarios y descartados» (pág. 75).
- «Promover encuentros con sindicatos compartiendo nuestra visión del trabajo, buscando caminos de humanización en el mundo del trabajo, creando puentes entre la Iglesia y esta realidad social» (pág. 76).
- «Respaldar y acompañar las plataformas de coordinación existentes en el ámbito de lo social: Iglesia por el Trabajo Decente…» (pág. 77).
Actúa y transforma
¿Cuántas situaciones como la de los trabajadores de Hermanos Campano necesitan de acompañamiento en mi diócesis?
¿Qué puedo hacer para que mi Iglesia diocesana se haga presente en los conflictos laborales como defensora del trabajo decente?
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Militante de la HOAC de Córdoba y miembro de AVAELA
