En el marco del itinerario 3, dedicado a la Formación, dos trabajadores cristianos exponen, en el Congreso de Laicos #PueblodeDiosenSalida, la experiencia y el testimonio sobre la conjunción fe y vida en los equipos de los movimientos apostólicos, sus métodos de formación, según la Doctrina Social de la Iglesia. 

Berchmans Garrido, responsable de Formación HOAC, ha intervenido esta mañana, en la línea temática número 2 del itinerario 3, para compartir la experiencia pedagógica de este movimiento de trabajadores cristianos de la Acción Católica Especializada. “Entendemos la formación como un proceso vital, que pretende que seamos cristianos y cristianas las veinticuatro horas de cada día y todos los días de nuestra vida”, señala Berchmans. La formación es, por tanto, un ejercicio de “estar en forma cristiana y de dar forma cristiana a nuestro proyecto personal de vida”.

Claves para la espiritualidad

El método encuesta y la revisión de vida obrera (RVO)  son el corazón de esta metodología, “el camino que seguimos para mantener un diálogo constante fe-vida”, es decir, una forma de situarse en la vida “para construirnos desde Jesucristo, en su Iglesia, en el mundo obrero y del trabajo, guiados por el Espíritu”, y por tanto, camino de espiritualidad. 

Para Berchmans, “el diálogo fe-vida busca configurar y desarrollar permanentemente un sentir, pensar y actuar como Jesucristo, es pues una dinámica permanente de conversión de nuestra vida concreta”. De ahí que este itinerario parta de un ver, que nos ayuda a  ir “asumiendo la sensibilidad y la mirada de Jesucristo”. Un juzgar, que nos sitúa en “la manera de pensar de Jesucristo”. Y un actuar, para ir “asumiendo la manera de actuar de Jesucristo en la realidad concreta de nuestra vida en la vida obrera” y del trabajo para vivirla de forma cotidiana, en presencia constante “con los otros, la sociedad, el mundo. Sin esa presencia, no sería diálogo fe-vida, sería monólogo”, apunta.

Es un método que “se hace y después se comparte en el equipo para volver a la vida”. En este sentido, la revisión de vida obrera (RVO) “se prepara revisando nuestra vida y se hace en el equipo para tomar las decisiones que nos permitan volver renovados a la vida”. 

Testimonio 

María José Rodríguez, de la diócesis de Granada, en la HOAC desde 1997, durante su intervención ha dicho «gracias a esta metodología he descubierto lo que decía san Pablo en la carta de los Hechos de los apóstoles 17, 28: en Él nos movemos, vivimos y existimos. Dios en medio del mundo y nosotros meros instrumentos para hacerlo accesible a nuestros hermanos».

Esta militante, ha reconocido que un principio, «pensaba en una formación como adquisición de conocimientos, o en una formación estilo tertulia», pero que por fin descubrió que es un método que «va penetrando en lo profundo de tu corazón, te va transformando sin apenas percibirlo y te posibilita un proceso de conversión permanente desde la apertura al amor misericordioso de Dios y a la vida de comunión».

Según su testimonio, «mediante este método sistemático y continuo he asumido una forma de ser, pensar y actuar que se han convertido en hábitos de vida y sin percibirlo apenas como ocurre con el aire que respiramos, me ayuda a situarme en ese mundo del trabajo, como terreno sagrado».

Para Rodríguez, «el gran valor del método de encuesta y de la revisión de vida obrera para mí en definitiva, es que es una metodología que te prepara y posibilita para la vida cristiana en medio del mundo, en mi caso del mundo obrero y del trabajo, al que estamos llamados a evangelizar».