Este jesuita, al que Marruecos no dejó volver en enero a Nador por denunciar el trato a los emigrantes en la frontera de Melilla, afirmó ayer en Murcia que “hace falta un Tribunal Penal Internacional sobre Derechos Migratorios”.
El jesuita Esteban Velázquez, que en los últimos cuatro años ha prestado apoyo a los inmigrantes subsaharianos en el Monte Gurugú, junto a la valla de Melilla, dijo ayer en Murcia que “el sufrimiento de los emigrantes es un laboratorio de imaginación, porque frente al infierno de donde vienen eligen el purgatorio que es Europa, aunque se les expulse y sufran el dolor de las concertinas”. [Imágenes]
Esteban Velázquez participó el sábado por la tarde en el Día de la HOAC, un acto organizado por la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) en el IES Licenciado Cascales, bajo el lema “Trabajo digno para una sociedad decente. Nuestro mundo indecente: personas excluidas, desahuciadas, descartadas”. Además de la conferencia de Esteban Velázquez, los asistentes realizaron una colecta para ayudar a un comedor de niños de la calle en Nador, que regenta una congregación religiosa, y compartieron una merienda.