Sebastián Fernández (HOAC-Jaén)

Con motivo de la conmemoración de la Declaración de los Derechos Humanos, se han celebrado las IV Jornadas por los Derechos Humanos, en el Centro Cultural Poveda, de Linares. En la organización del evento han participado, la institución teresiana, la Asociación Elin, el Comité Oscar Romero y la HOAC.

Han sido tres momentos (2, 7, y 10 de diciembre) en los que hemos reflexionado sobre aspectos muy importantes de la vida social y de las personas.

La primera charla-coloquio tuvimos la suerte de compartirla con dos mujeres bolivianas, Teresa Serrano y Máxima Apacha, pertenecientes a la organización “Contexto” (apoyada por el Fondo de Solidaridad Internacional), que trabaja con mujeres indígenas de Bolivia e inciden en espacios eclesiales, para participar como pueblo en la construcción de una sociedad justa, fraterna, solidaria, de una iglesia liberadora. Teresa enmarcó la actual situación económica, social y laboral de su país poniendo de relieve las dificultades por las que atravesó una buena parte de la población, durante la dictadura de Banzer. Fue estremecedor su relato de las torturas sufridas por ella misma por parte de los militares. Máxima Apacha, ataviada con la indumentaria tradicional de su etnia, comenzó su intervención saludando en su lengua nativa, en un claro gesto de reivindicación de su identidad como pueblo. Continuó haciendo un recorrido por su historia personal de discriminación y desprecio en su etapa escolar y de malos tratos domésticos hasta conocer las organizaciones de mujeres en las que se ha sentido valorada.

La segunda charla-coloquio fue a cargo de la Banca Etica, en concreto de la Asociación “Fiare”, de Córdoba. Beatriz Oliver, expuso los objetivos de la misma: Financiar actividades económicas que tengan un impacto social positivo y transformador; ofrecer instrumentos de ahorro y de inversión responsables y crear redes de ciudadanos responsables. Un proyecto alternativo, que pone la economía al servicio de la persona y no como en el actual sistema, que la persona está al servicio de la economía.

Por último, Juan Francisco Garrido, militantes de la HOAC de Córdoba y maestro de escuela, en su exposición “Por una cultura liberadora” nos hizo reflexionar sobre la necesidad de una cultura, en la que nuestra forma de sentir, pensar y actuar, como cristianos, sea la misma que Jesús y seamos comunidades de referencia para los demás.